KOTARO VIVE SOLO (KOTARO WA HITORI GURASHI).
7,5/10
Kotaro vive solo es la segunda adaptación, primera animada, del manga homónimo escrito e ilustrado por Mami Tsumura, publicado en la revista Big Comic Superior desde marzo del 2015. Está protagonizada por un niño de cuatro años que se va a vivir solo a un apartamento, inverosímil premisa que la serie de anime enfoca con un tono realista. La pequeña trampa es que el niño, a pesar de mostrar comportamientos o miedos propios de su edad, es bastante más maduro de lo habitual. De hecho, es más maduro y sabio que muchos adultos, a los que acostumbra a dar lecciones morales con su virtuoso ejemplo. En fin, ni siquiera un precoz prodigio sería tan espabilado como nuestro querido Kotaro.
Sin embargo, a pesar de esa licencia artística, habitual en las producciones con niños inteligentes como protagonistas, el tratamiento del personaje está bien realizado y, en la lógica de esta ficción, resulta creíble. Es una interesante mezcla de infancia y extraordinaria madurez. Es más, creo que cierta frialdad del personaje -apenas si ríe, apenas si juega, apenas si se descontrola- tiene que ver con la exquisita educación japonesa y no tanto con sus características como personaje.
Parte del encanto de la serie reside en el tratamiento costumbrista de tan peculiar punto de partida. Tiene gracia ver lo bien que se las apaña Kotaro para sobrevivir en la ciudad y cómo lo tratan, o protegen, o usan los adultos que se encuentra en su camino. Por supuesto, parte de la trama estará dedicada a desvelar progresivamente por qué vive solo y como va creando una familia a su alrededor. Por otra parte, hay una subtrama acerca de un mangaka, vecino de Kotaro, a la que me hubiera gustado que le dedicaran más tiempo. Eso es porque me interesa mucho el proceso creativo, pero convengo en que quizá no era lo mejor para la serie.
La estética es tan realista como la trama y solo introduce elementos no realistas para expresar la sorpresa de algún personaje, un recurso habitual en el anime que aquí es empleado con mesura. No hay nada asombroso en la animación ni en la parte visual en general, solo que, como de costumbre en Liden Films, el producto resultante es atractivo y eficaz. También la banda sonora es efectiva aunque un tanto convencional. En definitiva, para los amantes de los animes costumbristas seguramente sea una experiencia agradable, aunque no creo que despierte grandes entusiasmos.
Kotaro vive solo está dirigida por Tomoe Makino, mientras la compo de la historia es de Hiroshi Satо̄, el diseño de personajes de Tomomi Kimura y banda sonora de Yūya Mori.