LUM, LA CHICA INVASORA (URUSEI YATSURA).
8,5/10
La adaptación del manga escrito e ilustrado por Rumiko Takahashi (Ranma ½, Inuyasha), publicado en la revista Shōnen Sunday de 1978 a 1987, es uno de los animes más populares del siglo XX. Su personaje protagonista, la extraterrestre Lum, es uno de los iconos de la animación japonesa, y el humor entre absurdo y surrealista que cultivó fue muy influyente para las series cómicas que le sucedieron. Aquí, como en tantas series posteriores, era habitual que los aspectos más disparatados fueran subrayados con interpretaciones nada naturalistas y, a nivel visual, con deformaciones caricaturescas de los personajes y rupturas de las leyes de la física -personajes que acaban en la estratosfera tras recibir un guantazo de otro, por ejemplo-.
Lum, la chica invasora confió parte de su atractivo en la explotación de los cuerpos de las protagonistas femeninas. Lum, de hecho, se pasa casi todos los episodios ataviada con una suerte de bikini y ya en el primer episodio nos muestran sus pechos desnudos, incluso con los pezones brevemente visibles. Teniendo en cuenta que, además, casi cada aparición de mujeres es aprovechada con fines eróticos, creo que hay cierto sexismo en la serie y que ese aspecto no ha envejecido del todo bien.
No obstante, son los personajes masculinos los ridiculizados recurrentemente por lo esclavos que parecen de sus hormonas: prácticamente son incapaces de ver a una chica atractiva sin que pierdan la compostura. En cualquier caso, a pesar de ser un producto de una época en la que la corrección política no parecía ser una preocupación, presenta numerosos aciertos, especialmente una atractiva estética, el retrato satírico de la sociedad japonesa y un humor que oscila entre una inspirada imaginación y una comedia no muy sofisticada pero sí eficaz.
El manga fue adaptado de nuevo en un segundo anime, Urusei Yatsura (2022).