Paul Wenninger. Categoría: Cortometraje. |
‘Uncanny valley’, valle inquietante, es un término empleado en la animación 3d, pero también en robótica, que hace referencia al rechazo que sentimos al ver recreaciones humanas fotorrealistas que no acaban de resultar del todo creíbles. Paul Wenninger lo toma como título de un corto que parece buscar esa sensación, solo que con un interesante giro: los protagonistas sí son humanos, así que la impresión de rechazo podría venir del tratamiento de las imágenes.
Uncanny Valley es una fascinante obra experimental que invita a reflexionar sobre los límites de la animación. ¿Puede considerarse animado un corto que se rodó a la manera convencional, con actores de carne y hueso, en ‘imagen real’, pero cuyo montaje imita el movimiento característico de la pixilación, esto es, del stop motion con humanos como personajes? Porque sí hay un breve pasaje, muy bello además, que es stop motion de manual, pero el resto lo que hace es saltarse fotogramas para que el movimiento, en lugar de ser fluido, muestre esa discontinuidad o falta de fluidez característica de las obras de stop motion independientes, que es una de las razones por las que resultan tan atractivas.
No soy la persona más adecuada para concluir si es o no animación y que participara en el Festival de Annecy parece inclinar la balanza hacia el sí. En cualquier caso, es un corto brillante, doblemente estimulante por su estética y por su narración, que a su descarnada visión de la guerra suma un sorprendente desenlace.