Konstantin Bronzit. Categoría: Cortometraje. |
On ne mozhet zhit bez kosmosa, titulado ‘He Can’t Live Without Cosmos’ en su versión original, propone una suerte de realismo mágico aplicado al cine. En un contexto realista, Konstantin Bronzit introduce un elemento discordante, de un surrealismo que agradaría a Luis Buñuel. La trama progresa con aparente normalidad, hasta que el componente mágico gana la partida y ocurre lo que sospechábamos. Sin embargo, aun se reserva para el final una sorpresa sobre nuestro peculiar protagonista y un poderoso desenlace que a quien esto escribe le ha resultado inesperado.
Bronzit relata esta melancólica historia con un creativo empleo de la animación y una inteligente elección de planos. Hay varias escenas brillantes. En un momento de tensión entre la madre y el hijo, cambia bruscamente el ángulo y el tamaño de uno de los dos personajes crece considerablemente. El efecto es muy llamativo. Poco después, cuando nuestro protagonista observa su hogar, este está en constante movimiento, recurso igualmente eficaz. Finalmente, plantea dos veces un bello plano en el que vemos, desde el interior de la casa, un columpio.
Bello cortometraje.
Animación: Vera Shiganova y Yuliya Trofimova.