Cristóbal León, Joaquín Cociña. Categoría: Cortometraje. |
Tras su obra maestra La Casa Lobo (2018), Cristóbal León y Joaquín Cociña retomaron su personalísima mezcla de stop motion, pintura animada y arte de vanguardia para crear Los Huesos. Esta vez imaginaron que el primer corto de animación de la historia había sido creado en Chile en 1901 y redescubierto en una excavación más de un siglo después. La obra en cuestión mostraría el ritual de una niña llamada Constanza Nordenflycht, para el que habría usado cadáveres humanos y los espíritus de Jaime Guzmán, ministro durante la dictadura de Pinochet, y Diego Portales, “ministro e intelectual de la tradición oligárquica chilena”.
Quien conozca la filmografía de estos dos singulares cineastas ya habrá advertido que reúne los principales ingredientes de su cine: comentario político, recreación de un hecho macabro -ficticio en este caso- y reflexión sobre la naturaleza de la animación.
Concebido, según aseguraron, como homenaje a Wladyslaw Starewicz, es una propuesta emparentada con las experimentaciones de Jan Svankmajer o los hermanos Quay, sean o no influencias conscientes. Al menos, crea una sensación parecida que mezcla asombro por la imaginación desplegada, admiración por el talento con el que está ejecutada y cierta inquietud -que se tornará en miedo según lo impresionable que sea el espectador- por la sucesión de imágenes dignas del cine de terror.
Otra maravilla de dos de los más creativos cineastas del siglo XXI.