Will Carsola y Dave Stewart. Categoría: Serie. |
La serie derivada de Mr. Pickles (2014), protagonizada por el sheriff que se comporta como un niño, va siempre en patines y habla con una muñeca a la que él mismo pone voz, llegó a su segunda temporada con sus señas de identidad intactas. Todas menos una: el gore prácticamente ha desaparecido. Aunque sigue resultando grotesca y explota el asco en más de un pasaje, ya no se ven vísceras y cuerpos desmembrados continuamente. De hecho, puede que se me esté olvidando algún pasaje, pero creo que ya no hay nada de gore. Una notable evolución para una semi continuación de Mr. Pickles, que fue de lo más gore que se puedo ver en animación.
El resto sigue aquí: sátira de la América profunda, un imprevisible personaje central que en esencia es un niño inmaduro con una pistola -Sheriff-, una galería de extravagantes secundarios que podrían a su vez protagonizar su propio spinoff -el obeso Floyd sería un buen candidato-, grande dosis de humor negro y, por supuesto, ocurrencias de esas que no pueden surgir de cualquier mente. Pienso, por ejemplo, en los niños con rostros de animales, las ranas que paren bebés, el pudding como una adictiva droga o la cucaracha convertida en ayudante del sheriff.
Finalmente, aunque la denuncia social no es la especialidad de Momma Named Me Sheriff, hay un buen episodio, titulado Election, que ridiculiza con ingenio el machismo de la política estadounidense, literalmente “una competición de medirse la polla”.
Episodio completo: