Owen Crump y Robert McKimson. Categoría: Largometraje, Especial. |
The Thread of Life es el tercer especial producido por Warner Bros. Pictures para la serie de especiales The Bell System Science Series, tras Gateways to the Mind (1958) y The Alphabet Conspiracy (1959). De los tres de la Warner, este es el que más se parece a los creados por Frank Capra, puesto que la puesta en escena se limita a un solo escenario -y no particularmente elaborado-. Claramente, fue una producción bastante menos ambiciosa que las dos predecesoras.
El especial conserva buena parte de los atractivos de la serie, entre ellos el riguroso tratamiento de temas científicos -en este caso la genética-, el enfoque lúdico y el protagonismo de Frank C. Baxter, estupendo como siempre en el papel de erudito divulgador. Otra cosa es que, al grabarse en 1960 y centrarse en un campo como la genética, buena parte del contenido se ha quedado inevitablemente anticuado.
En cualquier caso, lo que más nos interesa a nosotros es la animación, otra de las claves de la serie, que tristemente está aquí menos presente que nunca. Los especiales de la Warner redujeron su presencia respecto a los producidos por Capra, pero es que en The Thread of Life apenas si hay animación y la que hay, aunque estimable, no es particularmente interesante. Las partes animadas son usadas como en tantos documentales científicos: para ilustrar partes diminutas del cuerpo humano y su funcionamiento que difícilmente pueden ser mostradas de otro modo. Esta vez no hay personajes animados, así que los cuatro pasajes animados son de carácter abstracto.
Y sí, tiene su gracia ver a los cromosomas en movimiento gracias a la animación, por ejemplo, pero se queda muy lejos de las divertidas escenas animadas que Chuck Jones, con diseños de Maurice Noble, dirigió para Gateways to the Mind. El caso es que la Warner encargó la dirección de las partes animadas a otro veterano de los cortos de Looney Tunes y Merrie Melodies, Robert McKimson, pero el material del que tuvo que encargarse no permitía lucimiento alguno. De las siete primeras entregas de la serie, esta es la única que no recomiendo ver si uno lo hace interesado únicamente por la animación.