Chris Cunningham
Talento: Director. |
Uno de los realizadores más peculiares, personales y excéntricos de los surgidos en los 90. Forma parte del trío de grandes directores que han revolucionado el mundo de los vídeos musicales, un trío completado por los igualmente geniales Michel Gondry y Spike Jonze. A pesar de los terroríficos y rompedores que son muchos de sus trabajos, ha sido requerido por algunos de los grupos y artistas más destacados de la industria, especialmente Madonna, pero también Portishead o Björk.
Nacido en 1970 en Berkshire, Inglaterra, comenzó a destacar con sólo 19 años, cuando trabajó en Spitting image, programa de televisión protagonizado por guiñoles, construyendo robots animatronics y esculpiendo caricaturas. Sólo un año después ya se hizo cargo de los animatronics de Alien 3. Pero su salto cualitativo se produjo en 1994, cuando, tras trabajar en el film Judge Dredd, fue contratado por Stanley Kubrik para trabajar en el animatronic del personaje protagonista del film que proyectaba realizar, A.I. (finalmente dirigido por Steven Spielberg). No obstante, participó en el film durante poco más de un año, porque lo abandonó para centrarse en su carrera como director.
Sus inicios en este campo estuvieron ligados al influyente sello Warp Records, que por entonces estaba revolucionando la electrónica ligado al IDM. Tras dirigir el llamativo videoclip Second bad vilbel (1996), para Autechre, se destapó como un gran talento con el conocido Come to daddy (1996), para Aphex Twin, vídeo en el que por primera vez se le ocurrió poner la cara del productor en diversos personajes (inquietantes niñas). A partir de ese momento le llovieron las ofertas, entre ellas las de Madonna, para la que dirigió el fallido Frozen (1998).
1999 fue un gran año: dirigió All is full of love, para Björk (los inolvidables robots con la cara de la cantante) y Windowlicker, con música de Aphex Twin y, de nuevo, con su cara por todas partes. Con la llegada del tercer milenio su actividad como realizador de videoclips decreció, pero siguió creando instalaciones de vídeo, como las llamativas Flex y Monkey drummer, y en el 2003 se recopiló lo mejor de su trabajo en el DVD The work of director Chris Cunningham.
Además, en el 2005 dirigió el inclasificable y sorprendente cortometraje Rubber Johnny, otra vez con música de Aphex Twin. El más reciente trabajo del que tenemos constancia es su remezcla audiovisual de New York Is Killing Me, de Gil Scott-Heron.