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Dan Harmon y Justin Roiland. Categoría: Serie. |
La primera tanda de episodios de la cuarta temporada fue entretenida y eficaz, pero se quedó lejos de los mayores logros de la serie. En cambio, la segunda parte, esos “nuevos cinco”, ha sido una sucesión de capítulos brillantes e imaginativos. De los cinco, cuatro se pueden situar fácilmente en el olimpo de Rick y Morty y hay al menos tres que serán particularmente recordados.
La serie creada por Dan Harmon y Justin Roiland, con la ayuda de excelentes guionistas y directores, sigue siendo de las más inteligentes y singulares de la televisión contemporánea, y no me refiero solo al ámbito de la animación para adultos.
Ahora ya solo nos queda desear que no haya que esperar mucho para ver los capítulos de la quinta temporada, pero no nos hacemos muchas esperanzas.
Ep. 6. La Rickstoria Intermimorty (Never Ricking Morty).
La segunda tanda de episodios comienza con una de esas complejas estructuras narrativas repletas de meta-humor que caracterizan la cuarta temporada. Recurre a multitud de personajes ya conocidos y un brillante gag final con mención al Covid-19. La idea es buena y son muchas las ocurrencias. Su ejecución, en cambio, no es del todo satisfactoria. En fin, es un episodio atractivo que gustará especialmente a los interesados por los mecanismos narrativos, pero no amplia las posibilidades de la serie ni su mitología.
Ep. 7. Promortyus.
Uno de los mejores episodios de la cuarta temporada. Es de los que presentan una elaborada civilización Alien con su propia forma de ver la vida y de reproducirse. Contado con una estructura narrativa inusual que funciona muy bien. Eso sí, no faltan meta-chistes, como de costumbre en esta temporada. ¡Ah, y vuelve Jerry!
Ep. 8. The Vat of Acid Episode.
Así es como será conocido este episodio en adelante, como el del tanque de ácido, porque sospecho que va a ser uno de los más comentados de la serie. Otra muestra del talento de los guionistas, pues logran crear eficaz comedia en un contexto oscuro y tan tóxico como el tanque que sirve de premisa para la sorprendente trama.
Además, cuando parece que estamos ante un capítulo menor, su desenlace, un brillante ‘tour de force’, le da al conjunto una dimensión aún más perturbadora.
Ep. 9: Childrick of Mort.
Otro de esos memorables e imaginativos episodios en los que los guionistas nos presentan un nuevo planeta con su peculiar forma de vida. La diferencia es que esta vez vemos cómo se crea la civilización.
La premisa es original y el desarrollo aprovecha para mezclar nuevas invenciones de Rick con divertidas críticas de la sociedad contemporánea. Además, los cinco miembros de la familia comparten protagonismo y no desaprovechan la ocasión para reírse una vez más de Jerry.
Por cierto, si ya tuvimos en este temporada porno con dragones, el gag final desarrolla una curiosa parafilia galáctica.
Ep. 10: Star Mort: Rickturn of the Jerri.
Fabuloso fin de temporada que, sin dejar abierta ninguna trama, plantea en su desenlace una nueva dinámica familiar que nos va a mantener intrigados y, de paso, alumbra un posible cambio en Rick.
Antes de llegar a ese logrado final, la guionista, Anne Lane, y los directores, Wesley Archer y Erica Hayes, han planteado un espectacular desarrollo con muchos de los ingredientes clave de la serie: humor ácido, trama compleja de avance impredecible y con multitud de posibilidades, trepidantes escenas de acción -la pelea entre Rick y su viejo amigo es tremenda-, e interesantes planteamientos de ciencia ficción.
Todo eso, por supuesto, aderezado con los habituales chistes a costa de Jerry, el porno -segundo capítulo con referencia al incesto- y la terapeuta de la familia.
