Toby Genkel, Florian Westermann. Categoría: Película. |
Esta adaptación del libro de Terry Pratchett, que en español fue traducido como El asombroso Mauricio y sus roedores sabios (2001), comienza de manera prometedora. Una narradora, que luego será también personaje, lee un cuento ilustrado infantil protagonizado por conejos. Ese fragmento está animado en 2D, por cierto, aspecto bienvenido a pesar de ser un lugar común de los largometrajes comerciales en 3D por ordenador. Es el primer juego con la construcción de una ficción, y con la existencia de una ficción dentro de la ficción, que da paso a varias rupturas de la cuarta pared durante el primer acto: en un momento dado, el gato Mauricio se dirige a cámara y confirma que él también puede ejercer de narrador, que para algo es el protagonista de la historia. “Si alguien no está seguro de eso, que se fije en el título”, asegura orgulloso.
Sin embargo, esa primera parte es un espejismo. Las reflexiones sobre la estructura tradicional de las fábulas se van difuminando para dar paso a un desarrollo convencional. Y es que El asombroso Mauricio forma parte de esa vertiente de la industria animada europea más preocupada por imitar la estética y narrativa de las majors que en trazar su propio camino artístico. Se nota especialmente en el diseño de los personajes y en el poco creativo empleo de animación 3D, que opta siempre por las decisiones más comerciales.
Aprecio el esfuerzo de compañías europeas por crear animación de estimable factura con un presupuesto mucho menor que el manejado por los estudios de Hollywood. También es notable la interpretación de Hugh Laurie como el gato protagonista. Sin embargo, nada de eso salva una propuesta más bien anodina que solo entretendrá a espectadores poco exigentes -y ni siquiera creo que les entusiasme-.