Wataru Takahashi. Categoría: Película. |
Desde 1993, cada año se estrena una película de la saga Shin Chan. Ni siquiera el 2020 fue una excepción. La que protagoniza esta reseña es la vigesimonovena entrega y quizá esté bien afirmar desde el inicio que es recomendable para los seguidores de la serie. Sus aspectos más atractivos, aquello que explica su éxito continuado durante décadas, están presentes aquí. En definitiva, quienquiera que haya crecido con Shin Chan, sea cual sea su edad, tiene muchas posibilidades de disfrutarla -otra cosa es que seguramente guste más a la infancia que a los adultos, salvo que sean entusiastas de la franquicia-.
Shin chan y el misterio de la academia Tenkasu comienza cuando el protagonista es enviado durante una semana a un internado para niños de élite. Es una clásica premisa de la comedia: situar a un personaje caótico, travieso y de espíritu libre en un entorno prácticamente opuesto, para que el choque entre la personalidad y las expectativas provoque situaciones humorísticas. Por supuesto, eso ocurre aquí desde el inicio, cuando el niño se burla del culo gordo del director del centro nada más llegar.
Dado que con esta ya son 29 películas, es inevitable que la trama se torne un tanto disparatada, o increíble, en más de un momento. Poco importa, creo que es lo de menos, que de lo que se trata es de ver a Shin Chan y a sus amigos en otra aventura algo más ambiciosa que un capítulo de la serie. Por lo demás, la animación no es que sea una maravilla, pero cumple con el alto estándar que se espera de la industria japonesa.