2007: Encantada: La historia de Giselle (Enchanted)

0
Encantada: La historia de Giselle (Enchanted)amazon Disney+

Kevin Lima.
ENCANTADA: LA HISTORIA DE GISELLE (ENCHANTED).
5/10

Categoría: Película.
Guion: Bill Kelly.
Año: 2007.
País: Estados Unidos.
Género: Fantasía, Comedia, Musical.
Técnica: Mixta, 2D, 3D.
Estudio: Walt Disney Studios, James Baxter Animation (animación); Weta Digital, Tippett Studio (efectos visuales).
Idioma: Inglés.
Característica: Princesas, Príncipes, Parodia, Amor, Dragones.
Duración: 1h 47min.
Clasificación por edades: NR-7.
Streaming: Disney+.

Encantada: La historia de Giselle está a medio camino entre un homenaje a los clásicos animados de Disney y una autoparodia del estudio. Funciona mucho mejor cuando adopta claramente el segundo de los registros y naufraga en más de una ocasión al intentar trasladar a la ‘imagen real’ muchas de las constantes de su cine de animación.

Comienza con una secuencia animada de diez minutos que referencia numerosos films esenciales de Disney, algo que será una constante durante el resto del metraje: figuran planos prácticamente calcados de Blancanieves y los siete enanitos (1937), La cenicienta (1950), La bella durmiente (1959) o La bella y la bestia (1991). En general, esa introducción sirve como prototipo de lo que uno imagina al pensar en la animación de Disney, con el tipo de princesa, de príncipe, de animales, de atmósfera y de enamoramiento a primera vista que caracterizan los clásicos de su filmografía.

Esa parte es la mejor de la cinta, así que irónico y triste que fuese realizada en un momento en el que la compañía había anunciado el cierre de su estudio de animación tradicional ante los malos resultados en taquilla de sus películas en 2D. Por entonces ya llevaba dos largometrajes en 3DChicken Little (2005) y Descubriendo a los Robinsons (2007)- y esa iba a ser la tónica en adelante. De hecho, la animación en 2D tuvo que ser encargada a James Baxter Animation, el estudio de un ex animador de Disney, James Baxter. Este film remitía, en definitiva, a un tipo de film animado que la compañía había abandonado, por mucho que luego lo retomara, parece que por última vez, en Tiana y el sapo (2009).

El resto de la película, en la que ya apenas si hay animación o es en 3D, resulta bastante menos satisfactoria por muchas razones. Disney contó con Kevin Lima, un director que parecía adecuado: tenía experiencia en dos films animados, Goofy e hijo (1995) y Tarzán (1999), y otro rodado con actores de carne y hueso, 102 dálmatas (2000). Se supone que podía manejar ambos medios, pero las escenas de ‘acción real’ están rodadas con poca pericia y rara vez sacan partido del guion.

Un guion que, en cualquier caso, es el gran problema. Creo que hay buenas ideas que parecían prometedoras sobre el papel pero que no lo son una vez en pantalla. En unos casos es porque el paso la ‘imagen real’ hace que se pierda la magia. Por ejemplo, el equivalente realista de la típica escena disneyana de los animalitos que ayudan a la protagonista resulta muy poco encantador cuando vemos a animales realizados en 3D por ordenador. En otros casos es por una pobre puesta en escena, como el número musical en Central Park.

Luego, hay cuestiones problemáticas que derivan del empleo de actores de carne y hueso en situaciones habituales del ámbito animado. Pienso en el baile, que queda terriblemente deslucido; en esos amagos de erotismo con la escena de la bañera o la princesa que acaricia el pecho del abogado -el sexo no tiene cabida en el cine animado de Disney-; o en los besos a una princesa inconscientes: claro que sé que es una convención de los cuentos y que interpretar eso como un ejemplo de acoso quizá sea desproporcionado, pero lo que se acepta relativamente bien con dibujos animados chirría cuando lo vemos con personas.

Eso sí, reconozco que quien quiera que se encargase del casting acertó: Amy Adams es una elección brillante como princesa Disney, James Marsden está perfecto como estereotipo andante de príncipe -otra cosa es que luego mostrase sus limitaciones interpretativas en otra película híbrida, Hop (2011)-; y Susan Sarandon está imponente como reina malvada.

Reseña Panorama
Puntuación
5
Compartir

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here