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Marc Riba y Anna Solanas. Categoría: Cortometraje. |
Los cortos para adultos de Marc Riba y Anna Solanas suelen ser descorazonadores, inquietantes, a veces hasta terroríficos. Son historias demoledoras, tremendas, cuya narración y estética favorecen la sensación enfermiza o de horror que siente el espectador. Otra cosa es que también desarrollen una vertiente apta para público infantil que ha dado obras tan encantadoras como Lupe y Bruno (2005), Bloqueados amontonados (2014) o sus aportaciones para las películas antológicas Menudos Héroes (2015) y Zibila y el poder de las rayas (2020).
Candela retoma su vertiente adulta pero muy posiblemente sea su más bonita historia en ese ámbito. Es cruda en ocasiones o, al menos, muestra la crueldad de la soledad en una de las franjas de edad más vulnerables y que más la padecen: los ancianos. De hecho, llama la atención lo explícita que llega a ser para tratarse de una obra con muñecos. Sin embargo, a pesar de la tristeza de la soledad, los directores dejan pasar un resquicio de esperanza, un gesto de emotiva humanidad. Por eso, a pesar de la profundidad con la que trata el lado menos amable de la vejez, es una de sus más bonitas obras.
Ah, y como de costumbre, el diseño de personajes de Núria Riba es excelente.
