Adrian Dexter, Pernille M.A. Kjær. Categoría: Cortometraje. |
Cuando Marcel Jean presentó la Sección oficial de cortometrajes del Festival de Annecy 2022, afirmó que el comité de selección había advertido un considerable aumento de la duración de las obras. Semanas después, en una entrevista con la revista Animation Magazine, declaró que, si la tendencia continuaba, tendrían que cambiar la forma de programar los cortos. Bien podía estar pensando, entre otras producciones, en Terra incognita, cuya duración de veinte minutos es inusualmente larga y se acerca a la de un especial televisivo o un mediometraje.
Por supuesto, aunque la duración no es un factor para determinar el interés artístico de una obra, ese aumento de metraje se puede interpretar como un síntoma de la creciente importancia de este tipo de producciones. Posiblemente no dejen de ser propuestas minoritarias en la industria del cine, pero sí abundan los cineastas que emprenden ambiciosos proyectos de cortometraje por la libertad creativa que suelen proporcionar sin por eso renunciar a la excelencia técnica y artística que se espera de un film de corte autoral pensado para ser proyectado en cines. Es el caso del que nos ocupa.
Terra incognita es excelente en todos sus aspectos y un convincente ejemplo de hasta qué punto es preciso ver cortos para descubrir algunas de las mejores propuestas de animación. Visualmente es un espectáculo en el que cada fondo, cada plano de hecho, es una preciosidad digna de ser largamente admirada. Tal es el nivel de detalle en algunos personajes que hasta me pregunto cómo hicieron para animarlos.
Finalmente, aquello que cuenta y cómo lo cuenta es muy interesante. Hay una profunda reflexión sobre la existencia humana y nuestra relación con la naturaleza, el paso del tiempo y el curso de la civilización, entre otros aspectos. Hay también un extraordinario despliegue de imaginación que puntualmente me recuerda a la de El planeta salvaje (1973). Finalmente, disfrutamos de una estupenda narración que, salvo el recurso a la voz en off en la primera de las cinco partes, no precisa siquiera de diálogos.