Amanda Forbis, Wendy Tilby. Categoría: Cortometraje. |
Amanda Forbis y Wendy Tilby habían dirigido ya varios cortos, pero fue When the Day Breaks la obra con la que entraron a formar parte de la élite de la escena animada, de ese selecto grupo de cineastas cuyo trabajo es seguido con especial atención y se proyecta en los más prestigiosos festivales.
Ese estatus lo lograron con este personal y aventurado trabajo que combina animación tradicional con rotoscopia. De hecho, para conseguir esa estética tan particular, que mezcla texturas y estilos, buena parte del metraje fue dibujado o pintado sobre fotocopias. Así es como la brillante animación combina movimientos asombrosamente realistas de los personajes -que beben del rodaje convencional con actores de carne y hueso- y pasajes particularmente experimentales que prácticamente solo son posibles con la animación, como por ejemplo esos movimientos de cámara que nos llevan de una casa a otra a través de las tuberías del agua.
El empleo de la animación es enormemente creativo y lo mismo se puede afirmar del diseño de sonido o de la elección de canciones. Solo por esos dos aspectos audiovisuales ya merece la pena ver la obra detenidamente. No obstante, su atractivo se completa por la habilidad con la que las directoras entremezclan géneros. Pienso, por ejemplo, en la primera parte: la maestría con la que pasan de la comedia musical ligera al drama en cuestión de segundos, de tal manera que ambos tonos resultan convincentes. También es notable, aunque esto último sea más habitual en la buena animación, cómo logra reflexionar sobre la condición humana situando como protagonistas a animales antropomórficos.
When the Day Breaks fue premiada en Cannes, Annecy y Animafest Zagreb, entre otros destacados festivales, y recibió una nominación como Mejor cortometraje de animación en los Premios Oscar 1999, la edición en la que ganó El viejo y el mar (1999), dirigido por Aleksandr Petrov.
Nota: elegido por María Cristina Pérez para la sección ‘Un corto esencial‘.