LES SUPERCHERIES FINANCIÈRES.
7,5/10
Les supercheries financières es una mini-serie de animación dedicada a algunas de las mayores estafas financieras de la historia. Incluye la famosa venta de la Torre Eiffel, una falsa organización benéfica, una muerte fingida para cobrar el seguro y hasta la adivina que se dedicaba a vender parcelas en el cielo entre la alta sociedad brasileña, asegurando tener línea directa con Dios -fue absuelta en el juicio alegando que eso es lo que llevaba haciendo la Iglesia desde hacía muchos años-.
Los guiones, escritos por Joseph Beauregard y Pascal Mouneyres, presenta esas estafas con un inspirado toque de humor (negro en muchos casos), mientras la dirección de Joris Clerté propone una estética retro y minimalista que imita las primeras animaciones -hasta la banda sonora parece sacada de una partitura de los orígenes del cine mudo-.
Al durar minuto y medio, los episodios no suelen ir más allá de la anécdota divertida, pero aún así varios de ellos logran mostrar el lado más oscuro del ser humano. Y no me refiero solo al estafador, sino también al estafado, que habitualmente es engañado por su codicia o su afán de reconocimiento.
Este mismo equipo había ya realizado una serie muy similar, pero centrada en las esfatas literatias, Les Supercheries Littéraires (2013).