FUTURAMA.
9/10
Futurama es la segunda serie creada por Matt Groening, tras Los Simpson (1989) y mucho antes de (Des)encanto (2018). Que surgiese de la mente del autor de la familia amarilla, cuestión que la campaña de promoción se encargó lógicamente de recordarnos, fue una gran ayuda a corto plazo -es estrenó con gran expectación- pero también su principal reto. Cuando se estrenó en 1999, Los Simpson había completado diez de las mejores temporadas de la historia de la televisión, así que al compararse con la era dorada de la gran serie de animación para adultos, era casi inevitable que saliese perdiendo. Por otra parte, difícilmente podía igualar su audiencia, de ahí que fuera cancelada por FOX tras solo cuatro temporadas.
Sin embargo, Futurama logró abrirse camino gracias a una creciente nómina de seguidores que fueron apreciándola por sus muchos méritos, así que en el 2008 fue reactivada por Comedy Central -la cadena que emitía South Park-, que programó 68 capítulos más en los siguientes cinco años. Posiblemente sea el único caso, junto a Padre de familia, de serie de animación cancelada que logra ser aún más popular en su segunda etapa.
Desde un punto de vista estético, Futurama es claramente una serie hermana de Los Simpson, pues la habitan personajes con un diseño muy similar. Sin embargo, su futurista trama favorece mayor variedad visual por la colección de extraterrestres, naves y demás parafernalia del futuro. También el humor, una satírica visión de la sociedad, es similar al de la primera creación de Matt Groening. Es más, a pesar de transcurrir en el siglo XXI, los guionistas se las arreglaron para introducir divertidos comentarios sobre la sociedad contemporánea.
Finalmente, la serie funciona también como obra de ciencia ficción. En muchos casos su acercamiento al género es paródico, pero en más de un capítulo propuso interesantes y bien desarrollados conceptos sobre el espacio o el tiempo -véase el capítulo final, por ejemplo-. De hecho, en el corazón de Futurama hay una calidez y un trasfondo dramático que recuerda a los primeros años de Los Simpson. Pienso, por ejemplo, en ese emotivo episodio en el que vemos qué ocurrió con el perro de Fry que se quedó solo en el pasado.
