Nacho Subirats es el director del corto Oldie But Goldie (2019), realizado en ESDIP Animation Studios, que fue uno de los diez seleccionados en los Premios Goya 2021. Además, fue premiado en Weird Market, ese mismo año, por la serie que ha cocreado, Welcome to Fucking Rainbowland, propuesta de animación para adultos que tengo muchas ganas de ver. Este recién terminado 2021, además, fue nombrado embajador español de Toon Boom, reconocimiento que nos sirve de excusa para entrevistarle.
¿Qué animación te gustaba especialmente cuando eras pequeño?
He crecido con las películas tradicionales de Disney, por lo que siempre han sido un gran referente y motivo de inspiración en muchos de mis proyectos e ilustraciones. En cuanto a series también seguía consumiendo productos de la factoría como Gárgolas, La banda del patio o Patoaventuras, pero también era muy fan de los Looney Toones y anime como Bola de Dragón o Chicho terremoto.
Como ya he leído declaraciones tuyas de qué significa para ti ser embajador de Toon Boom, lo que me gustaría saber es qué implica. ¿Hay algún acto de entrega de certificados? ¿Debes emplear el software en todos tus proyectos? ¿El título de embajador tiene una duración determinada?
El título tiene vigencia durante todo este año 2021, y, a parte del reconocimiento que eso supone, entras en contacto con el resto de embajadores mediante meetings, tienes acceso a los softwares de forma gratuita durante un año y acceso a las versiones beta para probar los nuevos ajustes del programa.
La compañía canadiense ha elegido a 50 embajadores en todo el mundo. ¿Por qué crees que has sido uno de los elegidos?
Creo que estos años atrás, además de enseñar a manejar el programa a mis alumnos durante las clases, he desarrollado proyectos interesantes con Toon Boom en el equipo de Esdip Animation Studio. Además, junto a Nuño Benito de Moa Studio desarrollamos el proyecto de serie Welcome to Fucking Rainbowland, cuya animación creemos que seguramente se realice con Toon Boom.
Pasamos a tu faceta de director y animador. ¿Qué te interesaba contar en Oldie But Goldie?
Me interesaba sacar un producto con una animación muy fresca y desenfadada, intentando rescatar el alma del cartoon clásico. Como director, mi intención también era la de hacer brillar el trabajo de mis alumnos de ese año, y además, si podíamos esconder un pequeño mensaje social siempre añade valor a la historia.
¿Eres coleccionista de vinilos o conoces a alguien que lo sea al nivel del protagonista del corto?
Tengo una buena colección de vinilos de Jazz heredada y poco antes de empezar con el proyecto me interesé por vinilos de colección de pelis que me gustaban, como Ratatouille, Regreso al futuro o Solo en Casa que venden en la web Mondo.
El corto tiene una estética muy particular. De hecho, que yo apreciase, combina al menos dos tipos de estéticas. ¿Cuáles fueron tus principales influencias?
Efectivamente, como he comentado antes, la referencia de animación más evidente desde la cartela inicial es ese cartoon clásico de Tex Avery y los primeros cortos de Disney. Pero también queríamos atrevernos a investigar un poco más con animaciones más modernas como las de Maxime Delalande o Matt Williames. En cuanto a referencias para la estética nos fijamos mucho en las producciones de Tartakovsky y Gravity Falls.
¿En qué parte del proceso de producción se encuentra Robot Dreams, la próxima película dirigida por Pablo Berger, de la que has sido nombrado asistente de dirección?
Estamos empezando la fase de Producción y sólo puedo decir que el trabajo hecho hasta aquí es una maravilla, no puedo esperar a ver el resultado final.
Me pareció muy interesante el planteamiento de la serie Welcome to Fucking Rainbowland. ¿Sigue adelante el proyecto? ¿Tenéis ya financiación para una temporada o, al menos, para varios capítulos?
Hasta ahora hemos seguido manteniendo viva la llama preparando en nuestro tiempo libre parte de la preproducción, hemos hecho contactos con distribuidoras y productoras para ponerlo en marcha pero aun no podemos contar mucho. En MoA han estado preparando la serie de imagen real con extractos de animación 2D “YRREAL” que verá la luz dentro de muy poquito en la plataforma de TVE PlayZ y esperemos que eso nos de alas para hacer el proyecto que de verdad queremos hacer.
¿Qué es lo más enriquecedor de trabajar como animador en proyectos ajenos?
Ser parte de un equipo que rema en la misma dirección es un regalo, estando como animador en Final Frontier o Headless he aprendido muchísimo en muy poco espacio de tiempo sólo con ver el trabajo de mis compañeros y compañeras. Supongo que ver luego el resultado en pantalla grande tiene que ser super emocionante.
¿Puedes adelantarnos algún otro proyecto que tengas entre manos?
Tengo pendiente un pequeño cuento infantil que se nos ocurrió a mi mujer y a mi a raiz de tener a nuestro hijo que tengo muchas ganas de hacer. También me gustaría acabar algún día Eternity, un proyecto que nació en el Taller de Kenny Ruiz y al que le tengo especial cariño.