Entrevista a Manuel H. Martín

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Foto: Curro Medina.

Manuel H. Martín es un interesante y versátil director y guionista que ha dirigido varios largometrajes y que nos gusta, entre otros muchos motivos, porque emplea regularmente animación en sus proyectos. Le descubrimos con la estupenda 30 años de oscuridad (2012) y desde entonces le seguimos la pista. Recientemente ha estrenado otro recomendable documental, El viaje más largo (2020), acerca de la primera circunnavegación de la Tierra de Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano, que también incluye animación.

Además, es uno de los socios de la muy activa productora La Claqueta, de la que también nos habla, y dirige el Festival de cine Iberoamericano de Huelva, celebrado en línea en octubre del 2020, debido a la pandemia de Covid-19, con éxito de público.

¿Por qué quisiste incluir pasajes de animación en 30 años de oscuridad?

La naturaleza del proyecto pedía que “ilustrásemos” los pasajes de la vida de los topos de forma diferente. Apenas había documentación de los encierros y decidimos apostar por pasajes muy narrativos. Y entre optar por la ficción con actores de carne y hueso (algo habitual en los documentales históricos) y hacerlo con animación, optamos por esta segunda opción. Nos parecía un lenguaje muy interesante para el proyecto, para atraer a un público amplio. Además, para mi, como director, era también una forma de traer un universo que me parece fascinante, el del cómic y la novela gráfica, al largo documental.

Retomaste la animación en la serie Artpoética. Además de difundir la poesía, ¿qué te interesaba de recurrir al medio en tan inusual propuesta?

Para mi era una forma de tratar la poesía en un formato audiovisual popular. Sacarla de los textos y navegar por imágenes animadas, con estilos que pudieran ser apetecibles para un público infantil y juvenil. La finalidad, como en 30 años de oscuridad, es similar: buscar un lenguaje lo más atractivo posible para el público. Aunque lo cierto es que había un componente diferente: eran unas 53 piezas e intentamos que cada una tuviese un espíritu diferente, lo más cercano posible al espíritu de cada poema.

Arrugas (2011), Psiconautas, los niños olvidados (2015), Buñuel en el laberinto de las tortugas (2018)… Son varias las películas de animación para adultos recientes que adaptan novelas gráficas. Tú escribiste el guion de una en el 2018, Una historia de perros viejos. ¿Te gustaría verla trasladada al cine? De ser así, ¿querrías ser tú quien la dirigiese?

Sí, completamente. Me encantaría llevar a cabo ‘Una historia de perros viejos’. Creo que sería un interesante western. En cualquier caso, para mi lo más importante de todos y cada uno de los formatos en los que trabajo siempre es lo mismo: narrar historias.

Tu más reciente largometraje, El viaje más largo (2020), vuelve a incluir fragmentos de animación 2D. ¿Qué aporta la animación a la narración de un documental?

Creo que aporta dinamismo y actualidad a las historias que se cuentan.

Dibulitoon había realizado una película de ficción Elcano y Magallanes, La primera vuelta al mundo (2019). ¿Fue ese el principal motivo por el que quisiste contar con el estudio para que se encargase de la animación de El viaje más largo?

Lo cierto es que han hecho un enorme trabajo, son un gran equipo. Gracias a la película de animación 2D que habían realizado, tenían gran conocimiento de la historia, con mucha documentación y mimo por el trabajo. Han sido unos estupendos compañeros de navgeación.

La Claqueta produjo un corto de animación, Alfred y Anna, que además estuvo nominado a los Premios Goya. ¿Ves factible repetir la experiencia con un largometraje enteramente animado?

¿Qué sabe nadie?, como diría aquella canción interpretada por Raphael. La animación tiene una universalidad tremenda y unas grandes posibilidades de viaje, así que ojalá podamos tener más proyectos animados en el futuro.

¿Cuál es el proyecto de La Claqueta que más alegrías te ha dado o que estés más contento de haber emprendido?

Todos los proyectos que se hacen en La Claqueta dan alegrías. Hoy día, solo el hecho de sacar un proyecto adelante y que el público lo disfrute es motivo de celebración. En cierto modo, toda creación o producción debe ser eso, una gran celebración. Y si me tuviera que quedarme con dos títulos de la productora hasta el momento serían 30 años de oscuridad, que supuso un buen empujón para La Claqueta y especialmente para mi como director, y La trinchera infinita, por todo lo que está consiguiendo y por lo que significa para la productora después de casi 20 años de trabajo. Sin duda alguna, que lleguen nuevos e interesantes proyectos son mérito principalmente de ese enorme productor que es Olmo Figueredo.

¿Qué animación recuerdas ver de pequeño o que te gustase particularmente?

Podría estar hablando horas… porque siempre me he sentido muy acompañado por el cine y la televisión, especialmente con obras de género y de animación. Recuerdo con mucho cariño películas como  Las doce pruebas de Asterix y Obelix y Rock & Rule o las series de Alfred J. Kwak o Batman Animated Series. A lo largo de los años el cine de animación y el mundo de los cómics se han convertido en parte fundamental de mi universo emocional. Creo que se ha demostrado que en animación y cómic se pueden contar historias tan complejas como en la ficción tradicional.

¿Cuál es el comentario acerca de tus películas que más te ha sorprendido o más ilusión te ha hecho?

Lo que más me gusta es que me digan que las historias que yo dirijo (o escribo) “te llevan”. Es decir, que se disfrute de la narración y no se note tanto la “mecánica” y estructura narrativa que hay detrás. Mi prioridad es intentar contar las historias de la forma más fluida, para que sean lo más entretenidas y emocionales posibles.

¿Puedes adelantarnos algo de tus siguientes proyectos, sean o no animados?

De momento, no puedo comentar nada. Estoy en varios proyectos de formatos diferentes. Pero me gusta hablar de ellos cuando están más avanzados. Una manía particular propia: hablar de las obras una vez terminadas.

¿Qué obras de la industria de animación española te han gustado especialmente?

Te diría que dos de mis obras favoritas son españolas: en animación la película Buñuel en el laberinto de las tortugas, dirigida por Salvador Simó, y en cómic la novela gráfica Papel estrujado de Nadar. Son dos buenos ejemplos que demuestran el enorme talento que hay en este país.

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